Este 27 de enero
se llevará a cabo en la Biblioteca Cervantina del Campus Monterrey una
ceremonia en honor al bibliotecario, cronista-historiador y docente del
Tecnológico de Monterrey, quien falleciera el 24 de agosto de 2013, pero cuyo
legado permanecerá por siempre en la universidad de la que formó parte.
--
Como un reconocimiento a su
perfil como bibliotecario, cronista-historiador y docente del Tecnológico de
Monterrey, este 27 de enero se llevará a cabo el homenaje “Ricardo Elizondo, Un
Hombre del Tec”.
El también escritor, quien
llegó a ser un férreo guardián y promotor del Patrimonio Cultural del
Tecnológico de Monterrey, falleció el 24 de agosto de 2013, pero su legado
permanecerá por siempre en la Institución.
Nacido en 1950 en Monterrey,
Nuevo León, fue Contador Público de profesión, pero se dedicó luego a la
cultura y literatura, como su verdadera vocación.
A través de sus obras logró
retratar y compartir las costumbres y anécdotas de esta región del país,
llegando a ser reconocido como una de las plumas más importantes de la llamada
“Literatura del desierto”.
Escritor, conferencista,
archivista, bibliotecario, historiador, amante del arte, una persona muy
versátil con una gran personalidad envolvente a la hora de conversar,
consideran quienes fueron allegados.
Ricardo Elizondo fue un gran
representante de los escritores del noreste del País. Incursionó en textos de
poesía, de obras teatrales, fue consejero de CONARTE, estuvo vinculado a la
Academia de la Lengua en el capítulo mexicano, fue representante de México en
el programa Memoria del Mundo de la UNESCO, el cual promueve la preservación y
el acceso a la herencia documental de la humanidad.
Más de 50 obras y
colaboraciones cuentan en su legado, algunas de ellas muy renombradas como el
libro “Lexicón del Noreste de México”, para el cual realizó una serie de
visitas a pueblos y rancherías para conversar con la gente mayor de esos
lugares y conocer las palabras que provenían de esas raíces.
Libros como “Setenta veces
siete” (novela que obtuvo el Premio Colima del Instituto Nacional de Bellas
Artes en 1987), fue reeditada infinidad de veces.
Mientras que el libro “Polvos
de aquellos lodos”, donde recababa fotografías antiguas del norte de México,
que pertenecen al acervo del Tecnológico de Monterrey, fue de los primeros
libros editados en versión CD, en la década de los noventas.
Referencia
AGENCIA INFORMATIVA DEL TECNOLÓGICO DE MONTERREY. INSTITUCIÓN. CULTURA. REDACCIÓN PANORAMA. 20.01.2014
No hay comentarios.:
Publicar un comentario